
Peinando olivos
El vareo del olivo es una técnica ancestral que ha sido utilizada por los agricultores durante siglos.
La sabiduría del buen vivir es una cosmovisión andina que proviene de los pueblos originarios de los Andes (principalmente quechuas y aymaras). Es una manera de entender la vida y el mundo que se ha transmitido de generación en generación para vivir en comunidad y en equilibrio con la naturaleza. Actualmente, constituciones modernas como la de Ecuador y Bolivia reconocen el buen vivir como principio.
El concepto de buen vivir es holístico dende se entrelaza el bienestar individual y colectivo en equilibrio con el ecosistema. De esta manera, el mundo no está dividido entre lo humano y lo natural, sino que todo forma parte de un tejido sagrado y vivo, la pacha, donde todo está conectado: la tierra, el agua, los astros, los animales y los seres humanos. Y la Pachamama – La Madre Tierra– no es un recurso, es madre; la riqueza no se mide en lo acumulado, si no en la armonía de los vínculos.
Esta sabiduría milenaria nos recuerda que vivir bien no es vivir mejor que otros, sino vivir en equilibrio con todo lo que nos rodea.
Con los retos de nuestro tiempo, esta filosofía (equilibrio con la naturaleza, economía solidaría, justicia comunitaria y espiritualidad en lo cotidiano) ¿podría ser una necesaria propuesta de ética global?

El vareo del olivo es una técnica ancestral que ha sido utilizada por los agricultores durante siglos.

¿Y si miramos con otros ojos? Muchas veces, los objetos que creemos inservibles pueden tener una nueva vida.

Plantar árboles podría considerarse un hábito sostenible ya que contribuiría a restaurar el medio ambiente y sería una manera de combatir el cambio climático pues los árboles absorben CO2.